Las infecciones de orina son tan comunes como molestas. De origen bacteriano, afectan más a mujeres, por el simple hecho de tener una uretra más corta que los hombres, aunque nadie está libre de sufrir algún episodio.
Una vez contraída la enfermedad, hay personas que experimentan varios episodios al año. Las infecciones de orina de cierta intensidad precisan de tratamiento médico con antibióticos y se acompañan del riesgo de que las bacterias causantes de la uretritis o cistitis logren ascender por los uréteres hasta el riñón, pasando a estar frente a una infección de gravedad.
Prevenir es la mejor estrategia para ti a corto y medio plazo. Te evitas las molestias del proceso, el daño a la microbiota intestinal causado por los tratamientos y el peligro de que la infección llegue a comprometer tus riñones. Vamos a ver cómo prevenir la infección de orina, en general, añadiendo consejos adicionales dedicados específicamente a las mujeres.
Consejos para prevenir la infección de orina
Cuida tus defensas
Si pasas por un periodo en el que tienes las defensas bajas por estrés o como consecuencia de algún tratamiento médico, es más fácil que repitan las infecciones de orina. Las continuas agresiones a la mucosa en las infecciones recurrentes te dejan predispuesto a nuevos episodios, aunque puede ayudarte con suplementos para el tracto urinario.
Estos productos suelen combinar vitamina C, que acidifica la orina y la vuelve un medio hostil para las bacterias, con productos naturales como los concentrados de arándano y la manosa. También existen probióticos pensados para uso oral como Donacilus en cápsulas , que funcionan mejorando las defensas naturales de uretra y vejiga frente a bacterias.
Evita la humedad en la zona
Si eres mujer, una uretra corta y el hecho de que tu vulva contiene bacterias de manera natural hacen que debas cuidar más tu higiene, aunque no nos referimos solo al uso de limpiadores adecuados. Vamos a ver cómo prevenir las infecciones de orina en mujeres.
La higiene, en tu caso, implica cambiarse de bañador tras salir del mar o de la piscina, salvo si hace tanto calor como para estar segura de que no vas a regresar a casa con humedad en la tela.
Evita el uso de telas sintéticas en tu ropa interior y opta por tejidos transpirables y naturales como el algodón.
Tras realizar deporte, si has sudado, te conviene cambiar las braguitas que llevas por unas que estén secas, en caso de que no puedas ducharte inmediatamente.
Por último, al salir de la ducha o tras utilizar el bidé, sécate bien. Es un momento y te ayuda, no solo con las infecciones urinarias.
Orina tras el sexo
La orina de una persona sana es un fluido estéril, libre de bacterias. Tras tener actividad sexual, sobre todo si eres mujer, acostúmbrate a orinar para realizar un barrido de posibles bacterias que hubieran podido entrar en la uretra.
Limpieza en sentido correcto
Utiliza el papel higiénico desde adelante hacia atrás para evitar arrastrar restos heces y enterobacterias desde el ano hacia la uretra.
Síntomas de infección de orina y cuándo ir al médico
Hay cistitis y uretritis que necesitan de tratamientos prescritos con receta médica. Cuando la infección de orina se acompaña de ciertos síntomas, debes acudir al médico para que confirme con una analítica y, en los casos que señalaremos en este listado te aconsejamos pedir cita médica:
- Fiebre acompañada de los síntomas típicos como micciones pequeñas en volumen acompañadas de sensación de urgencia y dolor en el bajo vientre o en la región lumbar, solicita una consulta con tu médico.
- Orinar de un color rojizo. La presencia de sangre obliga a ir a una consulta. Por lo general, esa sangre procederá de las vías urinarias bajas y no supondrá mucho volumen pese a lo que pueda parecer, pero necesitas tratamiento.
- Si tu orina se ve grumosa, como con residuos apreciables a la vista, de nuevo debes consultar con tu médico. En caso de que, además, tengas fiebre alta, solicita una consulta preferente o acude al servicio de urgencias de tu centro de salud.
- Cistitis de repetición y te encuentras con mucho cansancio. Podrías estar acusando el uso reiterado de antibióticos, que debilitan tus defensas naturales. Un suplemento adecuado te dará un empujón para romper el ciclo de las infecciones que se repiten cada poco tiempo.
- Fiebre elevada con un dolor muy intenso en los riñones. Acude a un médico de inmediato para descartar que la infección haya alcanzado el riñón. Suele bastar con una visita al médico de guardia de tu ambulatorio o una consulta preferente.
Prevenir una infección de orina es relativamente sencillo y te ahorrará tratamientos con efectos secundarios, además de las molestias de la propia infección. Cualquiera, hombre o mujer, puede sufrir estas infecciones, aunque las mujeres y las personas con un sistema inmune debilitado son más propensas.
Buena parte de las infecciones de orina tienen buen pronóstico, precisen o no de antibioterapia, aunque no debes dejarlas sin atención: podría convertirse en una infección de gravedad, capaz de causar daños irreversibles en tus riñones. Por todo ello, insistimos en la importancia de la prevención.
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CEO Vistafarma.com
Farmacéutico colegiado num 2787
