Conoce los diferentes tipos de lentes de contacto que existen
Las lentes de contacto o lentillas se han convertido en un producto sanitario para corregir la visión muy popular y extendido entre la población. Millones de personas las utilizan a diario para corregir su visón, en lugar de gafas, ya sea por razones estéticas, de comodidad o porque realizan algún deporte.
En este artículo te explicaremos brevemente en qué consisten las lentes de contacto, qué tipos de lentes de contacto existen y algunos ejemplos de ellas.
¿Qué son las lentes de contacto?
Se trata de una lente fina y curvada que se coloca sobre la película lagrimal que cubre la superficie de los ojos. Son transparentes, pero se les suele aplicar un tinte de color azul para que sea más fácil distinguirlas y manejarlas. En la actualidad, podemos encontrar lentes de contacto duras y blandas, siendo estas últimas las más utilizadas.
Sus orígenes se remontan al año 1508, cuando Leonardo Da Vinci observó que si se hundía la cabeza en un recipiente de cristal con agua, la visión se modificaba. La idea la perfeccionó René Descartes en 1636, diseñando un tubo con una curvatura parecida a la de la córnea, que llenó con agua y en el cual, introdujo el ojo. A finales del siglo XIX, un soplador de vidrio alemán fabricó una lente parecida a las de hoy en día. Más tarde, fue adaptada por un médico y un óptico, para corregir los defectos visuales de las personas. Esta lente cubría todo el frente del ojo, eran pesadas y solo se podían llevar puestas unas pocas horas.
Tipos de lentes de contacto
Dentro de las lentes de contacto, podemos encontrar las lentillas blandas, duras y de colores. Las dos primeras se utilizan para corregir los siguientes problemas de visión:
- Miopía: Defecto en la visión que hace que una persona no pueda ver objetos con claridad en la distancia. Las lentes de contacto diseñadas para corregir este problema requieren una dioptría negativa (-).
- Hipermetropía: Se produce cuando una persona no puede ver objetos con claridad de cerca. Las lentillas que corrigen este problema requieren una dioptría positiva (+).
- Astigmatismo: Condición que afecta a la curvatura de la vista, causando visión borrosa. Las lentes de contacto diseñadas para corregir este defecto en la visión se llaman tóricas.
- Presbicia: También se conoce como vista cansada y se trata de un defecto ocular que suele aparecer a partir de los 40 años, provocando dificultad para ver de cerca. Las lentillas que corrigen este defecto se suelen conocer con el nombre de multifocal, progresiva, bifocal o presbiopía.
Lentes de contacto blandas
Están fabricadas con una gran cantidad de agua (entre un 40% y un 80%), por lo que son más cómodas, flexibles y transpirables durante largas horas. Ofrecen una mayor libertad de movimientos que las lentes de contacto duras o rígidas. Actualmente se utiliza el hidrogel de silicona para la fabricación de estas lentillas, lo que permite que llegue hasta 5 veces más de oxígeno a la superficie del ojo, haciéndolas más transpirables.
En el mercado podemos encontrar diferentes tipos de lentillas blandas según las necesidades de cada usuario:
- Lentillas diarias: Han sido diseñadas para llevarlas cada día y desecharlas al finalizar el día. Son útiles para las personas que sufren alergias, los usuarios ocasionales de lentillas, los deportistas, o las personas con una vida ajetreada.
- Lentillas quincenales: También son conocidas con el nombre de lentillas semanales. Se utilizan diariamente durante dos semanas y luego deben ser reemplazadas por un par nuevo. Estas lentes de contacto, requieren de unos hábitos de limpieza y almacenamiento diarios durante cada noche. Necesitaremos una solución indicada para nuestro tipo de lente y un estuche porta lentes para guardarlas durante la noche, junto con la solución.
- Lentillas mensuales: Se usa usan durante un mes (30 días) y al finalizar este periodo se reemplazan por un par nuevo. Su mantenimiento se realiza igual al de las lentillas descritas anteriormente.
- Lentillas de uso prolongado: Estas lentillas se pueden utilizar de forma continua durante un largo periodo de tiempo (generalmente no más de 30 días). No precisan de mucho mantenimiento ya que no tienes que quitártelas para dormir o ducharte.
Lentes de contacto duras
También llamadas lentes de contacto rígidas, permeables al gas o RGP, se caracterizan por tener una superficie pulida dura y no contener agua. Son más duraderas que las lentillas blandas y se pueden utilizar durante largos periodos de tiempo. Se suelen cambiar cada 6 o 12 meses, e incluso cada más tiempo, si se mantienen en correctas condiciones y las dioptrías o necesidades del usuario no han cambiado.
Requieren un tiempo de adaptación mayor al de las lentillas blandas. Se recomiendan a las personas que padecen astigmatismo, necesitan una alta graduación o para casos de deformidad de la córnea.
Lentes de contacto de colores
Se tratan de lentillas blandas, pudiendo ser diarias o mensuales, que cambian el color de los ojos de sus usuarios. Su función principal es estética, ya que suelen ser usadas por personas que no tienen ningún problema de visión y no necesitan graduación. Aunque también, pueden ser graduadas para tratar la miopía y la hipermetropía.
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